POLLO AL ALJARAQUE

Hace muchos años, siendo mis hijos muy pequeños, fuimos en una ocasión de vacaciones a la costa de Huelva. Alquilamos un apartamento en Aljaraque, un pequeño municipio muy cercano a la capital onubense. Era una casita modesta y con lo justo para pasar allí unos días.

Como íbamos a estar solo una semana, no llené la despensa. 
Un día quise poner unos filetes de pollo a nuestros hijos y me pareció muy triste ponerlos a la plancha sin más. Lo único que tenía allí era ajo y un bote de orégano. Así que inventé este plato que les encantó. Y aún lo seguimos haciendo y disfrutando.

Dicen que a veces menos es más. En aquellas vacaciones fue así, no cabe duda.

QUÉ NECESITO:

• 2 pechugas de pollo
• Aceite de Oliva Virgen Extra
• Ajo
• Sal, orégano
• Opcional, un poco de vino blanco

CÓMO SE HACE:

Troceo las pechugas de modo que queden piezas pequeñas, como medallones o filetes de unos tres o cuatro centímetros (recuerda que cuando lo hice por primera vez mis hijos eran pequeños y les gustaba encontrar piezas pequeñas en el plato). También se puede hacer en dados.

Echo un poco de aceite en la sartén y doro unos dientes de ajo en trozos gordos.
Añado el pollo troceado, lo voy rehogando. Si le voy a añadir un poco de vino blanco, apero a que pierdan la vergüenza y se lo echo. Luego añado la sal, y la pimienta si se quiere, y mucho orégano. 
Rehogo hasta que empiezan a dorarse. 
Se puede servir con patatas fritas y será la delicia de los más pequeños.