TORTILLITAS DE CAMARONES

O cómo llevar las playas de Cádiz a tu mesa

Nos gustan a todos en casa. Los míos hacen fiesta el día que las hago. Son fáciles de preparar, sabrosas, nutritivas. Puede ser que se pasen de calorías al tratarse de una fritura pero como las comemos ocasionalmente creo que no hay peligro para la salud. El peligro es no comerlas 😂




Uno de los bares en los que he comido la tortillita de camarones más espectacular y rica es casa Balbino, en Sanlúcar de Barrameda. Y si quieres saber porque le llaman "el templo de las tortillitas de camarones" te recomiendo que te pases por allí. No me dan nada, ni  siquiera saben que hablo de ellos en este pequeño blog. Pero he ido con mis tíos Regla y Manolo a esta taberna típica, las he probado  y creo que hablo con conocimiento de causa. ¡Están de muerte!

Sanlúcar no es que esté a la vuelta de la esquina. De acuerdo, no es el fin del mundo, pero está lejos como para ir a tomar unas tapitas. Así que lo mejor es poder hacerlas en casa y disfrutarlas cuando la ocasión lo merezca. O cuando encuentro camarones en el supermercado, que no los hay siempre. 

Me gusta hacerlas bien cargaditas de camarones. Que por algo se llaman tortillitas "de camarones". Aun recordamos en casa a la madre de nuestro amigo Pablo protestando en Romerijo (una freiduría típica de El Puerto de Santa María) porque las tortillitas de camarones no llevaban camarones. Eran masa pura con algún camarón añadido, pero la verdad es que escaseaban los pequeños crustáceos en aquellas tortillitas. Esto pasó hace ya unos años. Espero que hayan cambiado a su cocinero, por el bien de la tortillita de camarones y su fama mundial.

¿Cómo se hacen estas tortillitas? ¿Cómo llevar el aroma y sabor de las playas de Cádiz a tu mesa? Sigue leyendo y descubrirás lo sencillo que resulta elaborar esta típica tapa gaditana.

QUÉ NECESITO:

  • Harina de garbanzos, aproximadamente un vaso. Se puede mezclar con harina de trigo, pero como en casa hay intolerantes a este cereal las hago solo con harina de garbanzos
  • Agua templada
  • Camarones
  • Cebolla fresca, perejil
  • Sal, cúrcuma.
  • Aceite de oliva virgen extra

CÓMO SE HACE: 

Se echa en una fuente la harina de garbanzos, una cucharadita de sal fina, media cucharadita de cúrcuma, media cebollita fresca y unas ramas de perejil fresco, lavado y picado. Se añade un poco de agua templada y se mezcla todo. Se echan los camarones. Se prueba la masa para ver si está bien de sal y se rectifica si fuera el caso. 

Si la masa está aun muy espesa, se añade más agua, ya que debe quedar bastante líquida para que se extiendan bien sobre el aceite y queden finitas. Cuanto más espesa es la masa, más gruesa quedará la tortillita. Y viceversa, cuanto más líquida es la masa más finas y crujientes quedarán las tortillitas.

Aparte, se pone aceite de oliva en una sartén y se calienta. Cuando está bien caliente, se vierte la masa con un cazo, se fríe un instante y se le da la vuelta. Deben quedar doradas. Cuando alcanzan el color dorado por ambos lado, sin llegar a quemarse, se sacan sobre papel absorbente. 


Lo ideal es comerlas calentitas, recién sacadas del fuego. A veces, en casa, no da tiempo ni a presentarlas en otra fuente, porque todos vamos probando tortillitas según salen de la sartén. ¿Y qué más me da, si así las disfrutamos en familia?


Si te ha gustado esta receta, o si las haces de otro modo o tienes algún comentario puedes hacerlo aquí abajo. Estaremos encantadas de leerte. 




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