BIZCOCHO SIN GLUTEN DE CHOCOLATE Y COCO

¿Quien se resiste a un delicioso bizcocho de chocolate?

Es domingo y apetece descansar del bullicio de la semana, dejar aparcadas las preocupaciones del trabajo y disfrutar de la familia y de actividades hogareñas, ya que con la que está cayendo evitamos salir innecesariamente.

Hoy hemos querido dar un toque especial a esta soleada tarde de invierno. Ha llovido toda la noche y ahora el campo está precioso y la atmósfera limpia. Hace frío ahí fuera pero aquí, en casa, vamos a disfrutar de este delicioso bizcocho de coco y chocolate, sin gluten y hecho en panificadora. ¡Ya sabéis que adoro mi panificadora! 

He seguido básicamente la receta del bizcocho sin gluten con frutas que hice hace poco, pero he variado algunos ingredientes y cantidades.

QUÉ NECESITO:

• 200 grs. de harina de arroz
• 120 grs. de harina de mandioca
• 150 grs. de azúcar amarilla o azúcar integral
• 100 grs. de leche (esta es la cantidad que he usado pero le habría venido bien usar algo más de leche o algún otro líquido, pues ha quedado algo seco)
• 3 huevos
• 100 grs.  de aceite de oliva
• 100 gramos de coco rallado
• 100 gramos de chocolate rallado (he usado el chocolate negro con nata de Aldi)
• 1 sobre de levadura química
• 1 cucharadita de extracto de vainilla líquida
• 1/2 cucharadita de sal

CÓMO SE HACE:  

Como siempre, en la panificadora se echan primero los ingredientes líquidos y luego los sólidos. 

He puesto en la cubeta de la panificadora la leche, los huevos, el aceite.

Luego he añadido las harinas, la levadura, el azúcar, el coco rallado y el chocolate rallado, la cucharadita de vainilla líquida y una pizca de sal. 

He puesto la panificadora en el programa 10, pastel. Mi panificadora es de la marca Silver Crest, la del Lidl. A los 15 minutos ha dejado de amasar y ha pitado. En ese momento, le he quitado las palas y luego ha seguido su proceso de horneado durante una hora y veinticinco minutos. 

Al sacar el bizcocho de la panificadora, lo he espolvoreado con un poco de coco rallado y otro poco de chocolate, muy poquito, lo suficiente para adornarlo una mijina. Y luego lo he disfrutado con un poco de café y en buena compañía.