MERLUZA SÚPER VERDE AL CAVA

Esto es lo que pasa cuando tienes un resto de cava olvidado en la nevera

¿A quién no le ha sobrado alguna vez media botella de cava de Nochevieja en la nevera? A mi muchas veces, y antes solía tirarlo después de un tiempo porque pensaba que sólo servía para brindar con burbujitas en las fiestas navideñas. Hasta que comprendí que el cava es solo un tipo de vino blanco y que se puede utilizar también para aderezar guisos, tanto de carne como de pescado.


Tal vez conoces la receta de merluza en salsa verde. Yo la tengo publicada aquí. O has hecho alguna vez pescado con guisantes, como este. Hoy he hecho merluza súper verde, puesto que he realizado una salsa con guisantes y perejil. Además le he dado el toque del cava que estaba esperando en mi frigorífico a que alguien lo volviera a descorchar. 

Si quieres saber cómo se hace esta merluza súper verde, sigue leyendo. Es una receta muy fácil y resultona, además de realmente sabrosa.

QUÉ NECESITO:

  • Una merluza de aproximadamente 1,5 kg. No sé exactamente el peso de la merluza que he usado hoy porque la compré cuando estaba a buen precio en el mercado y la guardaba hasta este momento en el congelador. Pero calculo que las nueve rodajas más la cola pertenecían a una merluza de por lo menos ese peso. Con esta cantidad pueden comer diez personas (si comen cada uno una pieza) o cinco personas (si tocan a dos trozos por cabeza). Se puede realizar con lomos o filetes de merluza congelados que son más fáciles de porcionar. Si es así, hay que adecuar las cantidades del resto de los ingredientes.
  • Un bote de guisantes en conserva de 330 gramos peso neto/215 gramos peso escurrido.
  • Un manojo de perejil fresco.
  • Una cebolla. Dos o tres hojas de laurel.
  • Un vaso o dos de cava (depende de lo que te haya sobrado en Navidad 😂). Puede servir cualquier otro vino blanco con personalidad.
  • Aceite de oliva virgen extra, sal, pimienta.
  • Harina de arroz.

CÓMO SE HACE:

Le pedimos al pescadero que nos limpie la merluza y la corte en rodajas no demasiado finas. La parte de la cabeza y las agallas la podemos usar para otra preparación, por ejemplo para hacer un fumé de pescado. Enjuagamos y escurrimos el pescado y reservamos.

En una cazuela de fondo ancho ponemos un chorreón de aceite de oliva. Pelamos y picamos la cebolla y ponemos a dorar. Antes de que se ponga oscura, añadimos el bote de guisantes previamente enjuagados y escurridos. Lavamos el perejil, picamos la parte de las hojas y añadimos al sofrito. Dejamos hacerse los guisantes unos minutos y removemos de vez en cuando. Cuando empiezan a dorarse, lo apartamos de la candela. Echamos el sofrito en el vaso de la batidora, añadimos un vaso de cava, trituramos. Si queda demasiado espeso, le echamos otro poco de cava y volvemos a triturar. Reservamos este puré. 

En la misma cazuela ponemos otro chorreón de aceite de oliva. Añadimos varias hojas de laurel (al gusto). Después vamos enharinando levemente cada rodaja de pescado y las ponemos sobre el fondo de aceite. Dejamos que se doren levemente por un lado y luego por el otro. Tratamos el pescado con mucho cuidado para que no se deshaga. Una vez están todas doradas por ambos lados, las bañamos con el puré de cebolla, guisantes, perejil y cava. Si la salsa aun parece espesa, se puede añadir otro poco de cava a la cazuela. 





Añadimos sal al gusto y un poco de pimienta. Dejamos hervir unos cinco minutos, meneando de vez en cuando la cazuela para que ligue toda la salsa. Apagamos y ya solo queda servir y disfrutar. 



Se puede acompañar con una rica ensalada y además, si puedes, deberías rebañar la salsa con un buen pan. 

Si haces esta receta me encantará que me digas qué tal ha resultado. Si la haces de otro modo, también me gustaría saber cual es tu toque personal. Comparte, porfi. No cuesta nada.





Comentarios